domingo, 23 de mayo de 2010

Soberbia despedida

Me despojo de tus sentimientos y me olvido de quien solías querer ser.
Acepto quien eres.
No por tu palabras.
Si no por el reflejo de tus actos.
Me hago a un lado.
No te comprendo.
No te escucho.
Ni te atiendo.
Sólo te respeto.

Pero vale más que negar que no te escucho.
Que fingir que te atiendo.
Y que creer que te comprendo.

A medio tiempo.
Ya nada nos remite.
Sólo un pecado contigo comparto.
La soberbia de MIS valores.
La soberbia de TUS propias conclusiones.

martes, 18 de mayo de 2010

Disculpa por eso, amor mío.

Ver luces en tus luceros
fue como caminar en un parque
de gratas sombras
en una mañana de verano.

Escuchar tus melodías
fue como una triste canción de cuna.

Intercambiar segundos
fue algo inesperado
era comer helado
cuando nuestros manos
se amaban.

Pero ahora una montaña
nos separaba
Un río del pasado
nos ahogaba.
La escarcha por un futuro
diferente a lo vivido
nos cegaba.

Perdóname
si te he herido
pero no puedo ir encontra
no puedo mentirte
ni mentirme.

Te juro que quisiera
pero tu me diste una oportunidad
y jamás pensé
que volverías
por eso la tomé
y lo maté para siempre.

jueves, 13 de mayo de 2010

Minoría (no somos)

Somos los que damos la mano,
aunque no se tenga la certeza,
pero si se tiene la fe.

Somos los que hacemos
la palabra y el gesto desde lo profundo.
No sabemos de máscaras, no sabemos de trucos.

Somos los que no tienen coraza
tampoco tienen pudor.
Por que sabemos
que lo que viene del corazón
¡mal jamás hará!
aunque éste se pueda perjudicar.

Somos los que vinimos a dar.
No a exigir.
Somos los que vinimos a comprender.
No a confundir.
Somos los que vinimos a escuchar.
No a silenciar.
Somos los que vinimos a sanar.
No a herir.
Somos los que vinimos a unir.
No a separar.
Somos los que vinimos a ser nosotros mismos,
y a amarlos de igual forma.

miércoles, 12 de mayo de 2010

Recado

En el medio de tu soledad y la de ellos.
En la esquina de alguna foto.
En el vestigio de una historia que no fue fea.
En la esperanza que deja un arcoiris.

Si tu vas al sur, dile a su sombra
que deje a su paso flores,
para el funeral de nuestro amor.

Y si vienes a santiago
dile que traiga su disfraz de persona normal.
Por que sin eso, yo no lo voy a poder reconocer.
Tampoco sabré si lo podré recordar.

Por favor si lo ves dile
que en el viento yo escribí,
una canción subliminal para él.
Que en el cielo le dejé mi número de teléfono.

Y que los bostezos de su familia
son los bostezos,
de que yo no lo buscaré.
Por que olvidé el camino hacia él.
Por que olvidé quien fue él.

viernes, 7 de mayo de 2010

Agua de amor.

No te confundas.
No me confundas.
Que mi rosas aún son para quien no las quiso.
Pero ya llegara el invierno.
Y lo lloraré para luego congelarlo.
Aunque he pagado deudas de otros con amor.
Esta deuda sólo él puede saldarla.
Y así ha de llegar la primavera.
Su calor derretirá los hielos.
Sus disculpas lo convertirán en río.

martes, 4 de mayo de 2010

Necesario

Este tedio que todo lo invande es necesario
si quiero ir a las tablas donde mi voz
te llene de amor, sientas que porfin lo conquistamos.

Esta frío amargo lo llevo firme a mi pecho
si tengo que resguardarme
para volver a ver la cuidad
con la resonancia que tu amor dejaba.

La tarde es gris, la cuidad es apática
y aún así tiene los mismos parajes
que en días igual a este
fueron una sinfonía de colores
por que no era sólo yo, eramos dos.

Y el cielo azul se ha perdido
en la inmensidad de esta tregua
que me vi obligaba a sobrellevar
pero insisto es necesario.

Si así podremos hacer
un arcoiris con nuestros vocablos
y un monumento de compases propios.
¡Y el amor nuestro mayor estandarte!