martes, 22 de noviembre de 2011

ojos de Infante

El día en que te ví
por primera vez
sucedió algo inédito
en mi corazón.

Empezé a amar
con los ojos de infante
que hace mucho
creí abandonar.

Y así supe que
conocerte sería zambullirme
sin pensarlo como
cualquier niño
que no mide ni calcula
sólo vive
total de todas formas
aprenderá.

Y volví a ser niña
amando intensamente
pero lo más inédito
desinteresadamente
entregando luz y amor
por que un niño
sólo sabe y quiere amar.

Caminé inocentemente a tu lado
sin escudriñar ni juzgar
por qué sé que el pasado
a muchos nos suele pesar.

Ahora cara a cara
ambas miradas
vislumbro
la luz que tu
encendiste en mi.

Mirada de niñez.
Mirada transparente.
Mirada que quiere amar
pero la timidez de pequeño
no sabe cómo actuar.

Sólo viaja a los días
donde nada solía preocupar
donde vivíamos para ser felices
jugando, riendo, amando, alegrando
a quienes nos regalaron la vida.

Viaja a los días donde aún
no sabías que era dañar
quédate en ese instante
Y mírame de nuevo
mis ojos te darán la confianza
y la seguridad que perdiste
en el camino que te trajo
hasta acá.

Mis ojos te darán
la clave y semilla
que tu en un sólo instante
me regalaste.

Por cada paso
doy cien millas
¡y soy cada vez más niña!

Ven niño, ven gran pequeño
ven que quiero contarte
mi único secreto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario