Dulce oscuridad, que enternece tu piel.
Volveré. Volverás.
Los rayos se posarán nuevamente en mi corazón
y reiré, por que por fin eres tu.
Yo lo sé, aunque no conosca todo lo que eres,
conosco más de lo que me has permitido.
Y hemos sido un bálsamo para las heridas,
una luz en las propias tinieablas,
una esperanza de los sueños,
una noche llena de colores,
y un día lleno de melodías.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Archivo del blog
-
►
2011
(21)
- ► septiembre (4)
No hay comentarios:
Publicar un comentario